MADRID – “Hoy empieza la cuenta atrás de mi regreso”. Con estas palabras, el ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, anunció que será el candidato de Junts en las elecciones del 12 de mayo.
Desde el ayuntamiento de Elna, pequeña localidad del Sur de Francia, y frente a un millar de simpatizantes e invitados que cruzaron la frontera para asistir al evento, Puigdemont afirmó que había renunciado a integrar “la lista de las europeas”.
“Ahora que se abre la oportunidad de restituir la presidencia ilegítima e ilegalmente destituida por el 155 – dijo -, no tiene sentido que rehúya esta responsabilidad por comodidad personal”.
En la primera fila, estaba toda la “plana mayor” de Junts que, con Puigdemont candidato, espera reavivar el fuego del independentismo.
El ex presidente de la Generalitat, en un discurso de aproximadamente una hora, muy aplaudido por los presentes, afirmó que la elección del 12-M representan una oportunidad para decidir a quiénes escoger entre “los que quieren convertir Cataluña” en una “autonomía inoperante” y los que, en cambio, quieren “una nación independiente”.
El líder de Junts hizo un llamado a la unidad de todas las fuerzas independentistas.
“Desde Junts pel Sí – comentó – no ha habido un proyecto con una capacidad de movilización tan grande”
Recordó que “ni Erc ni Junts yendo por separado “han logrado ser líderes parlamentarios” en las últimas elecciones.
“Nunca dejaré de pedir unidad – aseguró -. Cuando más hemos avanzado ha sido unidos. Mi candidatura tendrá que ir más allá de las siglas de Junts; tendré che incorporar perfiles de otros sectores. Solo si recuperamos la unidad tendremos posibilidades. Para el país no ha habido ningún beneficio ir por separados”.
Las palabras de Puigdemont, quien aseguró que de ser candidato a la investidura dejará “el exilio para asistir al pleno, para pedir personalmente la confianza de la Cámara” no cayeron en el vacío. Al poco tiempo de ser pronunciadas, “recibieron respuesta”.
Fuentes republicana no negaron la existencia de espacios para construir puentes. Sin embargo, comentaron que sería “repetir errores del pasado” la elaboración de una lista única “entre reproches”. Erc no ha perdonado aún “el abandono del Gobierno del 52 por ciento”. Mucho menos, “el haber votado en contra de los presupuestos más sociales de la historia de este país”.
Erc sugirió que un gesto de “buena voluntad” sería que Junts apoyara la propuesta de “financiación singular” avanzada por Pere Aragonés.
Redacción Madrid
