MADRID – Ya es realidad. La Reforma Constitucional pasa el examen final y la “política” salda una vieja deuda moral con 4 millones de ciudadanos. El término “disminuido” ya no aparecerá en la “Carta Magna”. Su lugar ha sido ocupado por la expresión “persona discapacitada”. De hecho, el artículo 49 de la Constitución ha quedado en los siguientes términos:
“Las personas con discapacidad ejercen los derechos previstos en este Título en condiciones de libertad e igualdad reales y efectivas. Se regulará por ley la protección especial que sea necesaria para dicho ejercicio”.
Votaron a favor de la reforma 312 diputados. En contra lo hicieron los 32 diputados de Vox. La diputada Lourdes Méndez ha tratado de justificar lo injustificable:
– Estamos de acuerdo en que se debe cambiar la Constitución, pero no así – dijo para luego añadir:
– Nunca nos convertiremos en marionetas cuyos hilos los muevan los enemigos de España.
La representante de la ultraderecha también esgrimió otra justificación; una muy parecida a la que emplearon los “populares” hace algunos años:
– Si abrimos el edificio constitucional a una reforma puntual, puede abocar a intentos de voladura de toda la arquitectura institucional.
Además señaló que no es intención de Vox llegar a acuerdos que puedan “blanquear” a Sánchez.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, intervino al final del pleno para reconocer que aún queda mucho camino por recorrer, “hasta abrazar la diversidad y alcanzar la plena inclusión”. Dijo que se está dando “un gran paso en ese afán” y pidió disculpas “por haber tardado tanto”.
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, subrayó que “la buena política es algo parecido a lo que acabamos de hacer, ha sido fruto de un pacto, un pacto en el que las partes han negociado y consensuado”.
Luis Cayo, presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), reconoció que la “Reforma Constitucional”, a través de la cual se tacha definitivamente la palabra “disminuido”, es un “logro y una mejora de país largamente anhelada”.
Redacción Madrid
