MADRID – Es probable que aún quede algún fleco suelto. Pero, sin duda alguna, se ha dado el paso definitivo hacia la investidura de Pedro Sánchez. El encuentro de Santos Cerdán, número 3 del Psoe, y Carles Puigdemont, ex presidente de la Generalitat y líder de Junts, no puede interpretarse de otra manera.
Los comunicados que Psoe y Junts, cada uno por su cuenta, difundieron al concluir el cónclave, fueron muy prudente. Destacaron el clima de cordialidad que acompañó el encuentro y constatado que la “negociaciones avanzan en la buena dirección”.
Desde hace semanas, Junts esperaba que un líder del Psoe viajase a Bruselas. La visita de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, no había sido suficiente. Puigdemont necesitaba que se le reconociese la legitimidad como interlocutor político. Y, para eso, era indispensable un alto representante del Psoe. Sánchez le concedió lo que quería. Envió a Santos Cerdán, número 3 del partido; pero sin cargos en el gobierno.
Cerdán y Puigdemont estuvieron acompañado por el secretario general de Junts, Jordi Turull; la presidenta del grupo del Psoe en el Parlamento Europeo, Izatxe García-Pérez y el jefe de la delegación socialista del Parlamento europeo, Javier Moreno. El cónclave tuvo lugar en la oficina que Carles Puigdemont, en la Eurocámara, comparte con Antoni Comín y Clara Ponsatí.
A nadie puede escapar que se está en la recta final. La firma del acuerdo, ahora, es sólo cuestión de días. El reloj nunca ha dejado de avanzar. El plazo máximo para la investidura de Sánchez, y la repetición de un gobierno de coalición, vence el 27 de noviembre.
La negociación con los independentistas, como era de esperar, se ha focalizado esencialmente en la amnistía. Y Sánchez, en una carta a la militancia del Psoe, ha asegurado que ese es el “camino correcto” para avanzar hacia “el reencuentro”.
La reacción del Partito Popular ha sido muy dura. Alberto Núñez Feijóo, presidente de los “populares” ha exigido al Psoe que deje de “jugar a espalda” de los españoles y reclamado que explique qué se negocia en Bruselas. También, qué está dispuesto a conceder al expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a cambio del apoyo para investir a Pedro Sánchez.
En su account en “X”, Núñez Feijó, luego del encuentro de Cerdán con el líder de Junts ha exigido, una vez más, que se vaya a nuevas elecciones porque lo españoles “no merecen un Gobierno nacido de una mentira”.
No menos dura han sido las declaraciones de Cuca Gamarra, secretaria general del Partido Popular. Ha reclamado a Sánchez una nueva cita electoral el 14 de enero. E hizo un llamado a la sociedad a movilizarse “por tierra, mar y aire” para combatir lo que, sostiene, “está fuera del marco constitucional, moral y ético”. Exhortó a los españoles seguir rebelándose “para que en su nombre no se impulse la amnistías”.
Redacción Madrid
