MADRID – El conflicto palestino-israelí siempre en primer plano. La investidura de Pedro Sánchez cedió protagonismo a la guerra que se libra en el Oriente próximo.
El Partido Popular pidió al gobierno unidad de criterios en política exterior. Razones no le faltan. Aun cuando el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha aclarado que las decisiones en política exterior las toma el jefe de Gobierno, la ministra Ione Belarra sigue avivando la polémica. Haciendo caso omiso al llamado a la prudencia del ministro Albares, pidió sanciones contra Israel, al que ha acusado de “estar cometiendo un genocidio en la Franja de Gaza”; exigió que se rompan relaciones diplomáticas con Israel y exhortó a la Unión Europea a que castigue a Netanyahu.
Elía Bendodo, coordinador general de los populares, consideró que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debería poner “la ministra Belarra en su lugar”. Le afeó que no la desautorice e insistió en que se está dando “un espectáculo lamentable ante la comunidad internacional”.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, por su parte, acusó al Partido Popular de querer pescar en río revuelto. Decimos, de querer sacar provecho de la guerra, “de la crueldad que estamos viendo, de las muertes, y del sufrimiento de las personas”. Consideró que “no hya que alinearse con un bando u otro”.
El ministro Albares llama a la prudencia e insiste en que hay que ser cuidadoso “en qué decimos, en cómo lo decimo y en cuándo lo decimo”. Reafirma la convicción del Gobierno, expresada por el presidente Sánchez en Bruselas, de que “la solución al conflicto es el reconocimiento de dos Estados: un Estado de Israel y un Estado de Palestina”.
La guerra en el Oriente Próximo y el temor de que esta pueda romper los delicados equilibrios geopolíticos en un área tradicionalmente inestable, no ha sido el único foco de atención de la política. El Psoe se anticipó en el tiempo y dio a conocer los nombres de los candidatos a las elecciones vascas y gallegas. El cabeza de lista a la Xunta será José Ramón Gómez Basteiro al tiempo que el aspirante a lehendakari será Eneko Andueza.
Por otra parte, continúa el diálogo del Psoe con los independentistas. Los negociadores socialistas admiten que los acuerdos están resultando más complejos de lo esperado. Sin embargo, aseguran que se avanza, aun cuando lentamente. Dicen que no hay prisa. Felix Bolaño, ministro de la Presidencia, señala que se está trabajando “para lograr un gobierno estable”.
Por su parte, Laura Vilagrá, consejera de la presidencia del “Gover de la Generalitat”, admite que aún es temprano para que la presidenta del Congreso, Francina Armengol, convoque el debate. El estado de las negociaciones, en su opinión, es “verde, muy verde”.
Por último, el Partido Popular y Vox, en Baleares, buscan zanjar las diferencias. Y alcanzar un acuerdo que permita aprobar el Presupuesto para 2024. La extrema derecha, en represalia a la decisión de los “populares” de tumbar la iniciativa para introducir la libre elección de la lengua en 2025, votó contra el techo de gasto que el Partido Popular había planteado. Los dos partidos se dieron 24 horas de tiempo para resolver las discrepancias.
A.T./Redacción Madrid
