MADRID – Nada en concreto. Todavía no. El encuentro entre Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, el primero de la ronda de conversaciones que se propone el candidato a la investidura, ha permitido acercar posiciones. Nada más. Psoe y Sumar, aliados potenciales en un hipotético gobierno progresista, confían en alcanzar un acuerdo programático que sea, a la vez, creíble, realizable y ambicioso. Esperan hacerlo antes de que termine el mes.
Las discrepancias sobre las cuales Psoe y Sumar tendrán que trabajar para acercar posiciones son sobre todo en materia laboral. Decimos, reducción de la jornada laboral y tipos de despidos. Lo ha confirmado Nacho Álvarez, negociador de Sumar. Álvarez reconoció que a Sumar no queda otro camino que llegar a un acuerdo, para construir una alternativa de gobierno progresista, útil y ambiciosa.
Poco antes del encuentro que protagonizaron Sánchez y Díaz, Alberto Núñez Feijóo sorprendía con sus declaraciones. En conversación con el periodista Carlos Alcina, el presidente de los populares defendió los pactos entre su partido y Vox. Lo hizo esgrimiendo argumentos parecidos a los expuestos por Sánchez para justificar el acercamiento del Psoe a Junts.
Núñez Feijóo admitió que “es evidente que no quiere pactar” con la extrema derecha; sin embargo, reconoció que no le quedaba más remedio.
“Es evidente que, antes de repetir elecciones en Extremadura y Valencia – dijo Núñez Feijó a Alcina -, pensamos que era mejor asumir, a pesar de que estuviésemos en campaña electoral, el desgaste y darle un Gobierno estable a Extremadura y Valencia”.
Alcina no pudo evitar hacer notar al presidente de los “populares” que esos mismos argumentos son los esgrimidos por Sánchez para justificar el acercamiento a los independentistas. Núñez Feijóo, algo incómodo, ha comentado al respecto que “de argumentos estamos sobrados”.
No menos sorprendente, por el tono y en especial por el vocabulario empleado, fueron las declaraciones del socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ex presidente de la Junta de Extremadura.
Rodríguez Ibarra ha criticado su partido por querer pactar con los indipendentistas el apoyo a la investidura de Sánchez a cambio de una Ley de Amnistía. Es así como, la mayoría de los socialistas hace causa común con Sánchez mientras el viejo dirigente del PSOE se une al coro de la “vieja guardia” liderado por Felipe González.
“¿Cómo se puede soportar que alguien viole a 40 millones de españoles? Porque, quién viola la Constitución está violándome; está violando mi voto”.
En Gijón, la luna de miel entre el Partido Popular y Vox ha sido efímera. La manzana de la discordia, el “Festival Internacional de Cine”.
La alcaldesa de Girón, Carmen Mariyón (Foro Asturiano), dio por roto el pacto con la extrema derecha, al que participaba también el Partido Popular. Anunció la decisión luego de que Santa Álvarez Rouco, diputada de Vox en la Asamblea, asegurase que era su intención hacer cambios al “Festival”. El objetivo, abandonar sesgos y partidismos para enfocar el Festival hacia otros derroteros: “trabajo, esfuerzo y respeto”. Decimos, hacia los ideales de Vox.
La respuesta de la alcaldesa fue un simple “se acabó”, a la vez categórico y decidido.
Redacción Madrid
