TEGUCIGALPA – Un enfrentamiento entre bandas rivales, que derivó en un incendio, dejó al menos 41 mujeres muertas y otras cinco heridas este martes en una cárcel cerca de la capital, informó la policía de Honduras.
En el motín que estalló dentro de la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) del poblado de Támara, 25 mujeres resultaron calcinadas y 16 asesinadas por arma de fuego, mientras que cinco reclusas fueron hospitalizadas por traumas, heridas contusas y por arma de fuego.
La contienda se produjo cuando las integrantes de una pandilla entraron al sector de otra banda rival y lo incendiaron, según relató a la prensa la presidenta de la Asociación de Familiares Privados de Libertad, Delma Ordóñez.
Las víctimas formaban parte de la pandilla Mara Salvatrucha, por lo que sospecha que el ataque fue perpetrado por miembros de una mara rival, la Barrio 18. “El módulo está completamente destruido, fue quemado en su totalidad”, aseguró Ordoñez.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, dijo en Twitter estar “conmocionada” por el “monstruoso asesinato de mujeres (…) planificado por maras a vista y paciencia de las autoridades de Seguridad”.
La mandataria convocó al ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, y a la presidenta de la comisión interventora de las cárceles, Julissa Villanueva, para que rindan cuentas de lo sucedido. “Tomaré medidas drásticas”, aseguró.
Villanueva, también presidenta Interventora del Instituto Nacional Penitenciario (INP), afirmó que la reyerta fue producto de “acciones del crimen organizado” en respuesta a la intervención anunciada por el Gobierno en algunas cárceles, y anunció “mano dura” contra los criminales.
“Mano dura ahora en la cárcel femenina de Támara. No vamos a tolerar actos vandálicos ni tampoco irregularidades en esta cárcel. Se autoriza intervención inmediata con acompañamiento de bomberos, policía Honduras y militares, se declara emergencia”, escribió la funcionaria en su cuenta Twitter.
El Centro Femenino de Adaptación Social (CEFAS) alojaba a unas 900 reclusas.
Las autoridades anunciaron en abril una serie de medidas para poner orden en las cárceles del país, donde impera el hacinamiento y condiciones sanitarias deplorables y donde se registraron una decena de tiroteos y enfrentamientos en los últimos meses.
Las medidas contemplan el bloqueo de llamadas de celulares, un desarme real de los presos y la clasificación de los reos por peligrosidad.
Redacción Caracas
