BRASILIA – Un grupo de seguidores del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, causó disturbios en Brasilia y prendió fuego a varios vehículos en protesta por el arresto de un líder bolsonarista.
Los manifestantes incendiaron un autobús urbano que circulaba por el centro de la capital y varios automóviles que estaban en el estacionamiento de una sede de la Policía Federal.
Los radicales también destrozaron fachadas de edificios, derribaron señales viales, lanzaron piedras a una unidad de bomberos y quemaron papeleras en la zona hotelera donde se hospeda el presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva.
Las acciones se produjeron en respuesta a la detención de un indígena de ideología bolsonarista, José Acácio Serere Xavante, detenido por orden e la Corte Suprema a pedido de la Fiscalía que lo acusa de instigar protestas de “antidemocraticas” en diversos lugares de Brasilia, tras las elecciones en octubre pasado.
La Secretaría de Seguridad Pública de Brasilia dijo que la acción de la Policía Militar se concentró “en la dispersión de los manifestantes” para “evitar una escalada todavía mayor de los ánimos” y afirmó que no se han producido detenciones relacionadas con “los disturbios civiles”.
Los disturbios fueron condenados por diversas autoridades, entre ellos el presidente del Congreso Nacional, el senador Rodrigo Pacheco.
“Son indignantes los actos de vandalismo registrados en Brasil, hechos por una minoría rabiosa. La depredación de bienes públicos y privados, así como el bloqueo de vías, solo sirven para recrudecer el escenario de intolerancia que permeó parte de la campaña electoral”, afirmó Pacheco en sus redes sociales.
Mientras, el futuro ministro de Justicia en el Gobierno de Lula, Flávio Dino, condenó la violencia en un mensaje en twitter: “Son inaceptables la depredación y el intento de invasión al edificio de la Policía Federal en Brasilia. Las órdenes judiciales deben ser cumplidas por la Justicia federal”, señaló.
Lula se impuso en las elecciones con el 50,9 % de los votos, frente al 49,1 % de Bolsonaro, quien no ha reconocido públicamente su derrota, aunque ha permitido el inicio de la transición.
Redacción Caracas
