MANAGUA – La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) declaró “en desacato permanente” al Estado de Nicaragua por incumplir medidas provisionales dictadas por este organismo a favor de 46 presos políticos.
En un comunicado emitido este martes, la Cidh hizo referencia a diversas resoluciones del organismo en demanda de la liberación de presos políticos, entre ellos la “liberación inmediata “ de los aspirantes a la presidencia Juan Sebastián Chamorro y Félix Maradiaga, así como para el expresidente del sector privado, José Adán Aguerri.
La corte reprochó la falta de observancia de las medidas que no fueron atendidas por gobierno nicaragüense liderado por Daniel Ortega, lo que, dijo, constitutye “un acto de desacato permanente a la obligatoriedad de las decisiones dictadas por este Tribunal”.
“Contrario al principio internacional de acatar sus obligaciones convencionales de buena fe y un incumplimiento al deber de informar al Tribunal, lo que pone en una situación de desprotección absoluta e incrementa la situación de riesgo en que se encuentran los beneficiarios”, indicó la Corte.
En su pronunciamiento, el Tribunal instruyó al Presidente de la Corte para que presente ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos un informe sobre la situación de desacato permanente y “desprotección absoluta en que se encuentran los beneficiarios de las medidas provisionales”.
Los 46 presos políticos están recluidos al menos 8 centros de detención. La mayoría de ellos en la cárcel policial conocida como El Chipote en Managua desde hace más de un año.
Nicaragua vive una grave crisis política que se hizo más aguda desde la rebelión civil de 2018, la cual fue sofocada por policías y paramilitares sandinistas con un saldo de 355 muertos, más de 2.000 heridos y 1.600 detenidos, además de miles de exilados.
A la fecha hay más de 200 reos de conciencia entre ellos empresarios, campesinos, líderes estudiantiles, aspirantes a la presidencia y figuras como el sociólogo Oscar René Vargas, ex asesor del Frente Sanidinista y el monseñor Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa (en arresto domiciliario) según el más reciente balance del Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas en Nicaragua, vinculado a la Cidh, del pasado mes de septiembre.
El gobierno califica a los prisioneros de “terroristas”, “golpistas” y “traidores a la patria”, por respaldar las protestas de 2018 que hicieron tambalear al régimen de Ortega.
Redacción Caracas
