CARACAS – El informe de la Organización de Naciones Unidas (ONU) presentado este 20 de septiembre reitera que los jefes de los servicios de inteligencia civil y militar de Venezuela, bajo las órdenes del presidente Maduro, son responsables de crímenes de lesa humanidad por haber reprimido violentamente a la oposición venezolana. El documento expresa que el mandatario venezolano y la autoridades de alto nivel fueron quienes diseñaron, implementaron y mantuvieron la maquinaria para reprimir a la disidencia. Esto representaría la comisión de graves delitos y violaciones de los derechos humanos.
Asimismo, al ratificar las denuncias de la ONU hechas en 2020, destaca como nuevos elementos la vinculación de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y algunos de sus funcionarios como el director general del Sebin, Gustavo Enrique González, el director del Helicoide entre 2014 y 2018, Carlos Alberto Calderón; a Ronny González, segundo del Helicode; general Iván Rafael Hernández director de la Dgcim, y a otros del equipo directivo como Rafael Antonio Franco, Hannover Esteban Guerrero y Alexander Enrique Granko.
Por su parte Marta Valiñas, presidenta de la Misión de investigación de la Organización de Naciones Unidas (ONU), aseguró que el informe se enfocó en dos aspectos: el rol organizacional e individual en cadenas de mando dentro de las fuerzas de seguridad, y las violaciones de DDHH cometidas en el estado Bolívar por agentes y no agentes estatales.
Precisó que los actos de violencia fueron planificados por una maquinaria de la DGCIM y el SEBIN para ejecutar el plan de diseñado por el gobierno, entre ellos Maduro, para reprimir la disidencia.
Redacción Caracas
