A pesar de inyección de dólares del BCV el paralelo se disparó a Bs 9,33 este jueves

CARACAS – El Banco Central de Venezuela (BCV) realizó este jueves una segunda inyección de dólares a la banca nacional, con el propósito de detener la tendencia alcista de la divisa que llegó a ubicarse este 25 de agosto en Bs 7,01 según el BCV y en Bs 9,33 en el mercado paralelo.

La idea es mantener estable el tipo de cambio con la inyección de 3 mil millones de dólares a través de las mesas de cambio. Fueron vendidos a personas naturales y jurídicas, según indicó Ramón Lobo, presidente de la subcomisión de Finanzas de la Asamblea Nacional.

Señaló que el BVC y el gobierno nacional buscan la captación de divisas y su equitativa distribución para atender a los sectores que necesitan bienes de capital para fortalecer el crecimiento de la economía.

Por otra parte, los rumores en torno al tema cambiario generan incertidumbres y fomentan la desestabilización nacional, por lo que se pide a los comercios realizar las transacciones a la tasa oficial diaria del BCV.

Circulo vicioso

Entre tanto, el economista José Manuel Puente aseguró que el problema es que la apreciación se ha ido acumulando en el tiempo y el tipo de cambio no es realista y está muy por debajo de su verdadero valor.

En su opinión la subasta del BCV tiene un efecto dominó y lleva a un círculo vicioso de comprar dólares porque se está devaluando y así sigue el ciclo de incremento.

La inyección del ente emisor puede hacer que el dólar baje por unos días, pero la apreciación acumulada podría dispararlo hasta Bs 20.

Alertó, según publicó Banca y Negocios, el BCV con la revolución no actúa como un ente independiente y no ha tenido autonomía ni autoridad técnica, y eso radica alguno de los problemas.

Finalmente, dijo para Circuito Onda que la inflación en el último está entre 139% y 140%.

Cabe recordar que además de la inflación, una de las más altas del planeta, existe una devaluación de la moneda nacional, a la cual desde el año 2007 le han quitado 14 ceros, lo que ha generado una depreciación del bolívar y del estándar de vida la población.

Redacción Caracas

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