CARACAS – El 27 de mayo de hace 15 años, por orden de Hugo Chávez se cerró uno de los canales pioneros del televisión venezolana con 54 años de operaciones, Radio Caracas Televisión (RCTV), y a partir de allí, comenzó el cierre de medios nacionales, cuya corriente, no era del agrado del gobierno.
´po el canal rcer canal más antiguo de Venezuela. Su estirpe derivaba de Radio Caracas Radio, emisora fundada en la Capital en 1930 gracias a la iniciativa del pionero Edgar Anzola y al emprendimiento del empresario William H. Phelps.
La decisión del fallecido presidente, comenzó por revocarle la concesión al canal e inmediatamente fue sacado del aire y sus equipos de trasmisión expropiados por el gobierno, para asignarlo a lo que es TVES, otro de los medios del estado que se apoderó de la señal del canal 2 cuyo lema era “el canal de todos los venezolanos”
La indignación nacional e internacional no logró nada, y por el contrario a partir de allí comenzaron más ataques a medios y el cierre de cientos de emisoras de radio en todo el país.
Aunque RCTV intentó salir por TV de cable, el oficialismo lo impidió y le puso un cerco, el cual se ha ido extendiendo a los medios privados que aún queda, generando una caída en la producción televisiva nacional y total ausencia de dramáticos, programas humorísticos, series y demás material que antes se realizaba en el país.
Según publicó El Impulso, en 2009 fueron cerradas 32 emisoras de radio en el país durante que el presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) fue Diosdado Cabello y el Instituto Prensa Y Sociedad Venezuela (IPYS) informó que 23 emisoras y una televisora habían sido suspendidas por emitir mensajes supuestamente llamando a la violencia y operar ilegalmente, pues “Conatel viola los estándares internacionales de libertad, diversidad y pluralidad que garantizan una radiodifusión incluyente”.
Para 2021 el Comité para la Protección de los Periodistas informó que 180 emisoras radiales fueron cerradas durante los mandatos de Hugo Chávez y su seguidor, Nicolás Maduro, todo orquestado en una campaña para silenciar a la oposición y reprimir el activismo, además de violar el derecho humano de estar informado.
Redacción Caracas
