CARACAS – Luigi Pisella, presidente de Conindustria, considera que para no afectar de manera negativa al sector comercial, el impuesto a las grandes transacciones (IGTF) debería aplicar una tasa de 0,3% a 1% tal como lo aprobó la Asamblea Nacional, y no pechar a personas naturales ni a pequeñas industrias.
En su opinión el 3% que aplicará e arancel, sigue siendo un impuesto alto que afectará a los más pequeños, lo que impulsará el incremento de la informalidad.
El vocero de los industriales, señaló que a pesar de haber emitido un documento con recomendaciones, las mismas fueron ignoradas, por lo que deberá esperase la publicación del nuevo reglamento para conocer cómo será la práctica de la ley.
Recordó además que el poder adquisitivo de los venezolanos sigue deteriorado y eso afecta el consumo de todo, y la leve recuperación de los últimos meses, no es suficiente pues la industria perdió el 75% del PIB.
Aunque esperan seguir el crecimiento este año, aseguró que todo dependerá de las medidas económicas que aplique el gobierno y alertó que el sector requiere mucho más de $75 millones para retomar la “dirección correcta”.
Tardará en ponerse en práctica
Por su parte, el economista Asdrúbal Oliveros es de la idea que esta ley a las grandes transacciones aún no será aplicada ni pechará a todos, y en su opinión tardará un poco aunque se publique en gaceta.
Dijo que debido al sistema multimoneda de Venezuela el impuesto se complica, por lo que deben elaborar un reglamento considerando el entorno.
Para el director de Ecoanalítica, aunque se busca normar la dolarización pero de forma errada, no se sabe cómo se hará con las transacciones tipo Zelle o mixta y además desestimula que la gente guarde su dinero en la banca, porque le cobrarán impuestos por usarlo.
Por último, advirtió que la ley no discrimina el nivel de ingreso, por lo que toda persona tendrá que pagar el impuesto.
Redacción Caracas
