MADRID – Pablo Casado desestimó las declaraciones del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá y señaló a Pedro Sánchez de “atacar” a las comunidades en las que gobierna el Partido Popular para “tapar su fracaso”.
El dirigente del PP posteó un tuit en el que rechaza la intención del Gobierno de España de analizar la puesta en marcha un impuesto a las rentas altas de la Comunidad de Madrid, luego del propósito del Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso de disminuir en medio punto todos los rangos de la tarifa autonómica del IRPF.
Escrivá señaló que el nuevo impuesto que había reclamado el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, “tiene mucho recorrido” y argumentan que podría servir para compensar al resto de comunidades el efecto capitalidad que existe en Madrid.
Declaración que ha sido criticada por Pablo Casado en redes sociales y que utiliza para arremeter contra el presidente Pedro Sánchez, acusándole de “atacar a las comunidades en las que gobierna el PP”.
“Sánchez pretende tapar su fracaso atacando a las comunidades autónomas del Partido Popular. Cuando lleguemos al Gobierno bajaremos impuestos y burocracia, reduciremos los ministerios a la mitad y mejoraremos la financiación autonómica”, dijo Casado.
El popular subrayó en el tuit que “la libertad y la prosperidad no están en venta”. Palabras en sintonía con la vicesecretaria de Sectorial del PP, Elvira Rodríguez, quién aseguró que las declaraciones de Escrivá son “un ejemplo más de cómo entiende el Gobierno el sistema autonómico”.
Unas críticas que comenzó por parte del Gobierno de Ayuso después de considerar que “los dirigentes incompetentes” no tienen que “cargar las culpas sobre los que lo hacen bien”. “Tiene que imitarnos, estamos dispuestos a explicarles cómo se hacen estas cosas”, aseguró el portavoz regional, Enrique Ossorio.
Al margen del grito del Gobierno madrileño, que acusó a Moncloa de alimentar la “madrileñofobia”, la propuesta no ha calado ni en los principales feudos socialistas.
La “tasa Puig” no tiene acogida en la España de las autonomías. Las comunidades aislaron al presidente valenciano, Ximo Puig, en su intención de crear una figura que grave la condición de capital económica y política de Madrid.
Aragón, Castilla-La Mancha, Cantabria o Extremadura han sido las primeras regiones, junto a la que preside Isabel Díaz Ayuso, que han rechazado la propuesta.
Por su parte, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, negó enfáticamente que el Gobierno esté trabajando en una figura que grave la capitalidad política y económica de Madrid. “Esa propuesta no está en la agenda del Gobierno ni lo va a estar nunca”, enfatizó.
Igualmente rechazó que haya “islas fiscales” en España, en referencia a Madrid, pero admitió “que, por el efecto capitalidad, hace que se atraiga una mayor inversión, un mayor volumen de renta, una mayor capacidad recaudatoria, a la que no tienen acceso otras comunidades autónomas”.
Redacción Madrid
