CARACAS – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó a los Estados que se garanticen los derechos humanos de los migrantes venezolanos que retornan al país en el contexto de la pandemia del coronavirus.
A través de un comunicado, la CIDH señaló que muchos venezolanos se han visto obligados a regresar a Venezuela, ya sea desde países de tránsito o acogida, a consecuencia del impacto de la pandemia por covid-19 en la región. De acuerdo a los datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), a junio de 2020, aproximadamente 50.000 personas habían regresado a la nación desde el comienzo de la emergencia sanitaria por el virus.
Según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), señalan que un total de 331.322 migrantes venezolanos en situación irregular en Colombia podrían retornar a Venezuela hasta el fin de 2020.
“La Comisión ha observado que las actitudes, discursos y políticas públicas de algunos gobiernos de la región podrían haber afectado las condiciones materiales para el libre consentimiento de estas personas al momento de decidir sobre el retorno (…) la exclusión de la población venezolana de la asistencia económica, social y de salud brindada a sus nacionales ha sido un importante factor que influyó en su decisión, así como también situaciones de desalojos forzados”, señaló la organización.
La CIDH subrayó que algunos gobiernos utilizaron el contexto de la pandemia para instar públicamente a los migrantes venezolanos a regresar a su país, o realizaron alocuciones estigmatizantes y xenofóbicos.
Señalaron que con el cierre de las fronteras, los migrantes venezolanos estarían enfrentando obstáculos y riesgos de vulneración de derechos durante las rutas de retorno. Por ello, la CIDH insistió sobre la necesidad de que los Estados inviertan en acciones de cooperación, intercambio de información y apoyo logístico.
Específicamente, el organismo destacó el caso de la frontera colombo-venezolana, donde el retorno se ha visto limitado debido a las restricciones impuestas por Venezuela, lo que ha generado que miles de venezolanos se refugiaran acampando cerca del puente Simón Bolívar sin servicio de baños públicos ni agua potable y sin poder cumplir con las medidas de aislamiento y cuidado.
Además, la CIDH también reiteró su rechazo a los discursos discriminatorios y amenazantes por parte de autoridades locales venezolanas, que solo agravan la situación de los migrantes.
