CARACAS – El encuentro “Construcción de Paz, el desafío de la Sociedad venezolana” que tuvo lugar en el marco del Día Mundial de la Paz y como parte del proyecto ReconciliACCION, tuvo como objetivo analizar los retos, desafíos y oportunidades que vive la sociedad venezolana para generar una convivencia basada en el concepto de paz.
En la actividad en línea participaron las organizaciones Oportunidad Acciones Ciudadanas, Mujer y Ciudadanía, People in Need y la Universidad Monteavila, con el apoyo financiero de la Unión Europea, así como un grupo de especialistas que compartieron sus análisis e ideas para contribuir con un proceso donde es fundamental la no violencia, la cultura de la paz y la resolución pacífica de los conflictos.
El espacio para el pensamiento y la acción moderado pro la activista social Alba Purroy, inició con las palabras de la Embajadora de la Unión Europea en Venezuela, Isabel Brilhante Pedrosa, seguido de panelistas como María Teresa Urreiztieta, Psicólogo Social y Política de la Universidad Simón Bolívar (USB); María Eugenia Mosquera, Historiadora especialista en América Latina y geopolítica y Presidenta del canal cultural VALETV; Juan Carlos Sainz-Borgo. Decano de la Universidad de la Paz, ONU, Costa Rica y Steve Hege. Director Adjunto del Programa de Latinoamérica del Instituto de la Paz de los Estados Unidos, USIP.
La Embajadora Brilhante invitó a sumar voluntades, plegarse a la no violencia y asumir la actitud de paz en todos los ámbitos de nuestras sociedades para no seguir expuestos al riesgo de conflictos y divisiones, por ello la necesidad de mecanismos de resoluciones pacificas de conflictos.
Comentó la necesidad de construir la paz, la convivencia pacífica y efectiva desde distintas miradas, iniciativa muy meritoria que cuenta con importantes visiones de grandes panelistasm cuyoes resultados benefician a toda la comunidad sin distingos políticos y sociales, lo que será siempre una buena oportunidad para profundizar las estrategias de cultura de paz y no violencia para Venezuela y le mundo.
Paz interior
La psicóloga María Teresa Urreiztieta, afirmó que la construcción de paz es hoy un desafío personal, familiar, comunitario, ético y político para la sociedad venezolana, el cual requiere empezar por procurar o preservar la paz en nuestro interior, para estar en paz con uno mismo como virtud y fuerza primordial para emprender acciones de paz.
Comentó que la realidad y tensiones golpean impidiendo la armonía y el bienestar interior, pero una vez se logra, la ganancia personal es doble y valiosa.
A diferencia, los resentimientos, odios, venganza y descalificaciones ofensivas, retrasan la causa democrática y obstruyen la paz anhelada.
“Esto nos obliga a pensar en cómo sanar, en cómo protegernos y fortalecernos en el camino de convertirnos en constructores de paz en medio de los actuales contextos venezolanos, teniendo en cuenta que la libertad y la paz se libran tanto en el corazón, como en las calles (…) Estamos en un país con una profunda crisis humanitaria compleja, con niveles de pobreza y desamparo alarmantes, un país ahora azotado por la pandemia de la Covid-19, enmedio de un prolongado conflicto político, sometidos a un ejercicio del poder de manera autoritaria y sin control que ha trastocado, y muchas veces quebrado, nuestros mundos de vida y nuestras relaciones”, destacó la experta.
Advirtió que es importante unir voluntades para crear una oportunidad producto del esfuerzo conjunto, la justicia y entendimientos que lleven a recuperar la institucionalidad democrática y del Estado de derecho en Venezuela.
Roles para el venezolano
Urreiztieta invitó a seguir multiplicando acciones y retar los desafíos que se siguen presentado a los venezolanos, para lo cual sugirió formarse organizarse, articularse y seguir preparándose.
Para ello recomendó a cada quien actuar como mediadores entre las partes ofreciendo herramientas y resolución constructiva y pacífica de los conflictos; conciliadores y articuladores, generando procesos de reconocimiento y entendimiento; reparadores de las heridas abiertas y de las víctimas de los conflictos; formadores y líderes en cultura de paz y acción no violenta activa como forma de resistencia civil y ciudadana; constructores de la paz mediante la búsqueda de la justicia en defensa y protección de los DDHH, y finalmente sembradores, que son creadores de vida y paz donde no las hay.
Finalmente, la también profesora de la USB llamó a sumarse los pacificadores que buscan un cambio profundo de la sociedad venezolana, de los ambientes y de las relaciones, lo que implica una dura tarea, ética y política, para que Venezuela retome su camino hacia la restitución del Estado de derecho, la democracia y la paz sostenible y duradera.
