Petróleos de Venezuela (Pdvsa) se está preparando para recuperar una parte de la producción perdida en los últimos meses impulsando las operaciones de mezcla de crudo en la Faja del Orinoco.
Las sanciones estadounidenses sobre Pdvsa han privado, desde 2019, a la estatal petrolera de importar los diluyentes necesarios para producir grados de crudo exportables.
Pero el domingo, 13 de septiembre, Pdvsa terminó de descargar un paquete de 500.000 barriles de condensado iraní para la empresa conjunta, Petropiar, operada con la estadounidense Chevron Corp, con el objetivo de impulsar las operaciones de mezcla.
El condensado, que se utilizará para diluir el crudo extrapesado de Venezuela, llegó el fin de semana pasado al principal puerto petrolero del país, José, en un transportador de crudo muy grande (VLCC) sin nombre. El servicio de seguimiento TankerTrackers.com identificó el barco como propiedad de Irán mediante el uso de imágenes de satélite.
Se desconoce el contenido completo del envío desde Irán, pero se espera que Pdvsa también utilice nafta pesada importada como diluyente para reactivar la producción, dijo una de las fuentes.
