Bolivia aprobó una resolución en el cual establece que los menores de 18 años de edad y de nacionalidad venezolana que se encuentren en situación de calle podrán regularizar de forma gratis su situación migratoria en el país a través de sus padres.
Los objetivos de la medida son proteger y respetar los derechos humanos de los migrantes. También, se desea evitar que estos menores de edad sean posibles víctimas de trata y tráfico de personas y se pueda lograr la reunificación familiar.
“De esta manera no vamos a tener niños fantasmas, es decir, sin tener su identidad, niños que no son reconocidos ni siquiera como ciudadanos, sin acceso a salud ni educación”, expresó Marcel Rivas, Director general de Migración de Bolivia.