Francisco López Domínguez, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela (CIV), reiteró que las restricciones por la pandemia han afectado aún más al sector que ya registraba signos de paralización.
Manifestó que el gremio debe empezar a activarse ya que los corredores inmobiliarios en muchos casos son empresas individuales, no tienen un sueldo mínimo y dependen de las operaciones, acotó que se han dado algunos procedimientos, pero que el sector necesita dinamismo.
Explicó que no se pueden detener en su totalidad porque la gente se tiene que mudar o necesita un alquiler, pero las operaciones se están haciendo “de forma privada y eso tiene importantísimos riesgos”, cuestión que ya se ha planteado al gobierno, se debe buscar un mecanismo vía tecnológica y digital que “garantice 100 % el traslado de la propiedad porque como dice la ley eso solo se va a dar en los registros subalternos”.
Precisó que, en el caso de registros proponen “que se digitalice el documento que se firmó en privado, se mande al Saren (Servicio Autónomo de Registros y Notarías) que lo guarda en la nube y ahí queda registrado para luego estar en cola al hacer la visita físicamente.
