CARACAS – José Luis Azuaje, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, aseguró que la iglesia estructura los protocolos de seguridad para abrir pronto las iglesias en el país.
Dijo que los protocolos a establecer toman como referencia las normas internacionales de higiene para resguardar la salud de las personas, como las aplicadas en Italia y España, pero adaptándolas a la cultura venezolana.
El vocero de la iglesia afirmó que los sacerdotes tendrán que pasar por un proceso de formación que incluye lavar sus manos tres veces durante la celebración de la misa, a fin de poder dar la comunión a los feligreses.
No obstante, destacó que tal vez a la población le cueste asimilar esta nueva forma de celebrar la liturgia, pues los venezolanos por su cultura y forma de ser, le será difícil atender indicaciones y nuevas medidas.
Azuaje advirtió que no es sólo tocar campanas y abrir puertas, sino que habrá nuevas normas que no permitirán los templos llenos y será obligatorio mantener la distancia social de mínimo un metro, entre algunas de las indicaciones que habrá que asumir.
Dijo que la iglesia no tiene recursos para aplicar como se exige, la aplicación de gel antibacterial a la entrada de los templos u otras medidas que se están proponiendo en Europa.
Precisó que en principio se mantendrá suspendida la confesión de carácter presencial, pero se ha incentivado el acto de contrición y petición de perdón al Señor.
En cuanto a la unción de los enfermos, sólo se dará en casos que no presenten un motivo de contagio.
Finalmente, señaló que la CEV también elaboró un documento al gobierno, pidiendo llegar a un consenso con todos los sectores del país para atender la crítica situación de Venezuela, así como los problemas de salud agravados con la llegada de la pandemia.
Por último el comunicado de la iglesia reitera el grave proceso de deterioro nacional, el cansancio y sufrimiento de la gente y el deseo de enfocarse en esos aspectos para ayudar a los venezolanos.
