CARACAS – Michelle Bachelet, alta comisionada de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, afirmó este jueves que en Venezuela se reducen cada vez más los espacios democráticos.
“Cada vez se reducen más los espacios democráticos. Es una nación que tenemos bajo la mira”, afirmó Bachellet.
De acuerdo a la representante de los Derechos Humanos de la ONU, el país caribeño ha estado bajo la observación internacional en cuanto a la situación de los derechos humanos, “políticos y civiles, esencialmente”.
“Ha sido un caso donde nosotros hemos tenido un mandato, como oficina, de monitorear los casos desde fuera. El año pasado logramos que nos aceptaran tres personas trabajando en la oficina del coordinador residente allá (Venezuela). Nos han permitido visitar las prisiones, hablar con las víctimas, con instituciones de derechos humanos, etcétera”, expresó la diplomática mediante una videoconferencia.
Bachelet subrayó que tanto en Venezuela, como en Nicaragua, “donde hubo protestas, con muchos detenidos, con personas que murieron”, “los espacios democráticos se han ido reduciendo”.
“Son países (Venezuela y Nicaragua) que nosotros siempre seguimos monitoreando y presentando los reportes al Consejo de Derechos Humanos y aún nosotros tenemos el mandato de hacer los informes”, señaló.
Asimismo, advirtió que la situación económica en Venezuela “es bastante trágica, compleja, viene de antes, sin duda, pero se ha agravado con las sanciones y, ahora, con el tema de la pandemia (del Covid-19)”.
“Por eso el pasado 24 de marzo llamamos a que todos los países que tuvieran sanciones con cualquier país por favor las levantaran o suspendieran, para que pudieran tener (los países sancionados, como Venezuela) los elementos necesarios para dar respuestas a una crisis de esta naturaleza”, reiteró.
Mencionó el caso de los migrantes venezolanos que se han visto en la necesidad, de retornar a su país, ante el agravamiento de su crisis económica, pues quedaron cesantes ante las medidas de confinamiento aplicadas por los diferentes países que los acogían.
Bachelet insistió en que desde su oficina nunca respaldarán ningún tipo de violencia y que en esta coyuntura de pandemia es necesario que los líderes políticos realicen aún mayores esfuerzos “para ponerse de acuerdo” y “reevaluar qué es lo fundamental”, para las naciónes.
Manifestó estar preocupada por cómo en este contexto de emergencia sanitaria, en algunos países “hemos visto un abuso, un exceso” de decretos que aumentan las atribuciones a los presidentes y cómo se incurre en la violación al derecho a la expresión, la libertad de la prensa. Asimismo, acotó que hay países en los que, si no se cumple el toque de queda, hay un uso excesivo de la fuerza por parte de policías y militares.
