CARACAS – Este lunes, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) advirtió con “grave preocupación” los efectos del coronavirus en Venezuela debido a que los ciudadanos se encuentran en “extrema vulnerabilidad” por la “profunda y prolongada crisis humanitaria que atraviesa ese país”. Lo indicó en un comunicado oficial.
La institución tildó la crisis humanitaria venezolana como “sin precedentes”, Aseguró que la difícil situación ha impactado en el goce de los derechos: humanos, económicos, sociales, culturales y ambientales especialmente de las personas en “situación de vulnerabilidad, discriminación o exclusión histórica”.
Ante esta situación, recordó “el carácter interdependiente e indivisible de todos los Derechos Humanos”. Indicó que lo que más ha llamado la situación de la CIDH ha sido el deterioro progresivo de la red hospitalaria venezolana que cuentan con infraestructuras inadecuadas, escasez de medicinas e insumos y falta de personal medico calificado.
Precisó que a esa situación se le añade un clima de “persecución, acoso y hostigamiento” contra el personal de salud y las personas que han salido a las calles para manifestar la falta de equipos e insumos.
Alimentos y servicios públicos básicos
Asimismo, el órgano de la Organización de los Estados Americanos (OEA) denunció la insuficiencia de alimentos que presentan los venezolanos debido a la baja remuneración salarial y la hiperinflación que vive la nación. Señaló que a esa situación se le une la suspensión generalizada y frecuente de los servicion públicos y básicos como el agua potable, el gas natural y la energía eléctrica.
Resaltó que estos factores juntos ante la pandemia del coronavirus “conlleva a que las personas estén imposibilitadas para tomar las medidas esenciales de prevención (…) lo que aumentaría el riesgo de contagio”.
“La CIDH y su REDESCA llaman al Estado para que tomen medidas de carácter económico y social que se adopten sean aplicadas de manera equitativa y con arreglo a los estándares internacionales de Derechos Humanos, tomando en cuenta las diferentes realidades y necesidades de la población venezolana, sin que en ningún caso sean utilizadas como mecanismos de coerción o discriminación política ni de cualquier otra índole”, han reclamado.
Migración venezolana en riesgo
También, el comunicado se refirió al éxodo venezolano que este año podría cerrar con 5,5 millones de ciudadanos que decidieron huir de la grave crisis que atraviesa su país.
“La CIDH observa con gran preocupación los impactos desproporcionados producidos sobre las personas venezolanas migrantes, refugiadas y con necesidades de protección internacional generados por las medidas dirigidas a la contención del Covid-19 en los principales países de acogida y de tránsito en la región”, expresa la misiva.
Recalcó que la pandemia del coronavirus no puede ser utilizada como una excusa para que los estados evadan “sus obligaciones de derecho interno e internacional” en relación a aquellas poblaciones que necesitan de una protección especial.
Naciones deben garantizar resguardo
Destacó que las medidas para prevenir la propagación de la enfermedad no se deben mezclar con políticas y mecanismos migratorio que generen la ruptura del “principio de no devolución u obstaculicen el acceso a los instrumentos de protección adecuados”.
La CIDH pidió a los países receptores a “que cumplan sus obligaciones en materia de asilo y refugio y brinden medidas de atención y tratamiento de salud sin ningún tipo de discriminación porque toda persona, independientemente de su situación migratoria u origen, tiene derecho a recibir la misma atención médica que los nacionales”.
