CARACAS – Colombia pidió ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, tomar medidas para poner fin a la crisis humanitaria de Venezuela y lograr una transición política que conduzca a elecciones libres.
Francisco Barbosa Delgado, consejero de derechos humanos del presidente colombiano Iván Duque, dijo que la acción y la solidaridad deben basarse en el rechazo total de la dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela.
“El fin de semana pasado, el mundo vio directamente que el régimen terrorista, cuya principal característica es la violación de los derechos humanos, quemó alimentos y medicinas destinadas a personas hambrientas y famélicas en Venezuela”-alertó.
Recordó que Juan Guaidó, reconocido por la comunidad internacional como presidente encargado de Venezuela, viajó a Colombia para estar al frente del esfuerzo por lograr ingresar la ayuda humanitaria al suelo venezolano, por ello, el mundo no puede permanecer callado y por el contrario, se necesitan acciones que promuevan la transición y realización de elecciones libres y transparentes con observación internacional, a fin de garantizar el establecimiento de la democracia en Venezuela lo antes posible.
Siguen buscando diálogo con Trump
Al tocarle la intervención al canciller Jorge Arreaza y con muy poca presencia de los delegados, reiteró que el gobierno de EEUU organiza y financia la grosera agresión contra Venezuela y que le están pagando 20 mil dólares a lso militares venezolanos para desertar.
Apegado al mismo discurso de Maduro, dijo que la agresión el día del ingreso de la ayuda humanitaria provino de Colombia y que la Fanb y PNB pudo contenerla sin el uso de fuerza letal, pero debieron defenderse con bombas lacrimógenas.
“Venezuela fue agredida y pretenden ver que nosotros fuimos los agresores el fin de semana (…) Estamos investigando cómo murieron esas persona, pero de una vez ya acusan”.
Igualmente, pidió al Consejo firmar una resolución donde no se plantee la opción una intervención militar, al tiempo que abogó nuevamente por un diálogo entre Nicolás Maduro y el presidente estadounidense Donald Trump, con el fin de buscar una salida a la crisis venezolana.
Por último, denunció no sólo lo agresión norteamericana, sino el bloqueo económico y la congelación de activos venezolanos en el exterior, así como la intervención que esconden detrás del pretexto de la ayuda humanitaria y argumentó que todas esas medidas coercitivas unilaterales violan la carta de las Naciones Unidas.
Finalmente, el canciller del régimen reiteró la invitación a Michelle Bachelet, Alta Comisionada de la ONU para los derechos humanos, a que visite Venezuela y evalúe directamente el impacto del bloqueo que lidera Trump.
