CARACAS- Nicolás Maduro se mantiene en el poder sustentado por una Fuerza Armada compuesta alrededor de 95.000 y 235.000 personas que, según los jefes de sus diferentes componentes, son leales al Gobierno del líder chavista y rechazan al opositor Juan Guaidó como presidente encargado.
El apoyo de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana a Maduro sería la columna que mantendría en el poder al sucesor de Hugo. Este fue el principal argumento que como jefe del Parlamento venezolano manifestó Guaidó al jurar hace dos semanas su asunción como presidente encargado de Venezuela, un juramento que ha alcanzado el respaldo de casi toda América y casi toda Europa.
Tras la proclamación de Guaidó se esperaba un pronunciamiento inmediato por parte del ministro de Defensa, Vladimir Padrino, este se produjo horas después a través de Twitter y fue al día siguiente que el jefe de la FANB aseguró que tanto él como el resto de la institución respaldan a Maduro.
Sin embargo, en el gremio militar hay pronunciamientos que han ido surgiendo los cuales manifiestan no reconocer a Maduro y que a su vez piden a otros respaldar a Guaidó, como los casos de Funcionarios de la Guardia Nacional en el oeste de Caracas, como el general de división y director de Planificación Estratégica de la Aviación venezolana, Francisco Esteban Yánez Rodríguez, por ejemplo.
Los militares apoyan a Maduro por el poder que han acumulado con el chavismo y por “el control que este Gobierno tiene sobre ellos” manifestó Mercedes De Freitas directora Ejecutiva de la ONG Transparencia Venezuela, organización que se ha encargado de documentar importantes casos de corrupción en el país petrolero.
Con la llegada a la Presidencia del teniente coronel retirado Hugo Chávez, los militares comenzaron a ocupar cargos en el gobierno, y su sucesor, Nicolás Maduro, ha reforzado este gabinete con al menos una decena de ministros militares de la veintena de puestos que ya existían.
Los militares también están al mando de las industrias del sector minero e hidroeléctrico, así como en la estatal Petróleos de Venezuela por lo que existen muchas evidencias del temor que pueden tener los militares a rebelarse.
“Los militares además han sido cómplices de los abusos electorales que se han documentado no solamente por las organizaciones venezolanas, sino por la OEA, el Centro Carter, la Unión Europea, cuando han podido venir a hacer alguna observación”, afirma De Freitas.
Por su parte Eliezer Sirit presidente de la Comisión de Seguridad y Defensa del Parlamento venezolano, asegura que hay de militares que han sido cómplices de corrupción de los gobiernos chavistas y de ahí que no se atrevan a rechazar a Maduro.
También por temor a que la justicia actúe sobre ellos y perder todo el capital económico que han logrado construido al margen de la legalidad, y por el control de investigación y seguimiento a lo interno de las Fuerzas Armadas, un trabajo de inteligencia que estaría a cargo del G2 cubano.
Sirit manifestó que el que intente rebelarse, de inmediato es acusado, puesto preso, maltratado, pero, pese a las amenazas, asegura que existe una revuelta a nivel de las tropas y que entre los soldados de bajo rango hay un altísimo descontento.
