SANTIAGO DE CHILE – El Gobierno de Chile decretó un toque de queda nocturno en las zonas más afectadas por los incendios que devastan el país, con el fin de evitar robos. La medida concierne a 28 municipios en tres regiones en las que el presidente Gabriel Boric declaró el estado de catástrofe: Biobío, Ñuble y La Araucanía, y donde consideró “necesario” garantizar la seguridad con esta restricción de la circulación.
Las altas temperaturas, los fuertes vientos han dificultado la extinción de las llamas y los focos en combate se han cuadruplicado desde el inicio de la emergencia cuando eran 22 a los 90 de este jueves, según el informe del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred).
A nivel nacional hay 323 incendios forestales en desarrollo. De ellos, 90 están en combate, 186 controlados, cuatro extintos y 46 bajo observación o en trayecto.
Más de 5.600 bomberos y brigadistas forestales, con ayuda de contingentes de México, Colombia, España y Argentina, entre otros países, siguen intentando extinguir la ola de incendios.
Las llamas, que dejan al menos 24 muertos y unos 2.196 heridos, han arrasado más de 343.000 hectáreas en las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía y Maule, una superficie equivalente a un tercio del territorio de Puerto Rico.
La ola de incendios forestales ha destruido completamente 1.205 viviendas y dejado sin hogar a 5.570 personas, según el balance oficial.
Redacción Caracas