MADRID – Adentro, en el hemiciclo del Congreso, los diputados exponían sus puntos de vista, unos en favor y otros en conta. Afuera, una multitud de venezolanos residentes en Madrid, bajo los últimos rayos de sol de un verano que nos deja, gritaban consignas y cantaban el himno nacional de su país. Una manifestación de respaldo a Edmundo González Urrutia, a quienes ya consideran presidente de la República. Y de repudio a Nicolás Maduro, a quienes acusan de hacer alarde de un poder que ya no le pertenece.
Por una tarde, Venezuela estuvo bajo la lupa de la política española. ¿El Congreso reconocerá a Edmundo González Urrutia como presidente legítimo de Venezuela? Los diputados lo decidirán mañana. De no haber cambios de última hora, la matemática indica que la “proposición no de Ley”, impulsada por los “populares”, pasará sin tantos afanes. En efecto, a los votos favorables del Partido Popular y del partido de ultraderecha Vox se sumarán los de los diputados del PNV.
La “propuesta no de Ley” no es un imperativo. Y el Gobierno, como ya ha anunciado, esperará la decisión de la Unión Europea antes de pronunciarse al respecto. Sin embargo, el pronunciamiento del Parlamento tiene un alto valor simbólico. Y representa una bofetada al gobierno del presidente Maduro que, a pesar de haber transcurrido casi dos meses desde las presidenciales, todavía no ha presentado las actas de la votación, para su verificación y autenticación.
En el curso del debate, Cristina Narbona, presidenta del Psoe, ha defendido la posición del gobierno socialista. Ha recordado las “falsas esperanzas” alimentadas con la proclamación de Juan Guaidó como presidente del Venezuela.
“El gobierno de Pedro Sánchez – ha dicho la diputada socialista – ha hecho más que ningún otro gobierno por el pueblo venezolano y por aquellos que combaten el régimen de Maduro”
Ha señalado que desde 2018 se han acogido a la posibilidad de asilo político o humanitario más de 125 mil venezolanos. Y ha destacado que si Europa no ha reconocido a Maduro ha sido por la postura decidida del Gobierno español.
“Eso – dijo la presidenta del Psoe – no es estar del lado de Maduro”.

La bancada “popular” no opina lo mismo. Y la diputada Cayetana Álvarez de Toledo, con el verbo de tribuno que la caracteriza, lo ha dejado muy claro. La tesis que defiende el Partido Popular, y que Álvarez de Toledo ha reafirmado desde el estrado del Parlamento, es que el gobierno le ha hecho un favor al presidente Maduro. Los conservadores sostienen que la salida del candidato de la Oposición venezolana ha sido una “operación diseñada por la dictadura, organizada por Zapatero y facilitada por el gobierno español”
Álvarez de Toledo ha dicho que “reconocer González Urrutia es un imperativo estratégico”. Y, con su locuaz oratoria, ha atacado sin miramientos al ex presidente Zapatero por el rol que, en su opinión, desempeñó en Venezuela.
José María Sánchez García es una de las diputadas de la bancada del partido ultraderechista Vox. Intervino en el debate para subrayar la “ambigüedad calculada” del partido de Génova 13. Dijo que el partido que ha impulsado la “proposición no de Ley” para que se reconozca a Edmundo González Urrutia presidente legítimo de Venezuela pertenece a la familia de los “populares” europeos de Úrsula von der Leyen, quien preside la Comisión Europea y se resiste a reconocer González Urrutia como presidente.
Sánchez García considera la posición del Partido Popular “poco seria” y asegura que “no ayuda la causa venezolana contra el régimen chavista”.
Los partidos a la izquierda del Psoe cargaron contra el Partido Popular al que acusaron de tener un “doble rasero”. Significativa la intervención impregnada de sarcasmo del diputado de Erc, Gabriel Rufián. Recordando las repetidas declaraciones de los populares, quienes tildan al gobierno de Sánchez de “régimen bolivariano”, se preguntó irónico: “¿Por qué el líder de la oposición de una dictadura chavista viene a exiliarse a otra dictadura chavista?”.
Desde el balcón de los invitados del hemiciclo, asistían al debate, entre otros, el exalcalde Mayor de Caracas, el ítalo-venezolano Antonio Ledezma; el ex alcalde de Chacao, el español-venezolano Leopoldo López, y Carolina González, hija del exdiplomático y candidato de la Oposición a las “presidenciales”, Edmundo González Urrutia. Afuera, en la Plaza de las Cortes, los venezolanos que respondieron al llamado de María Corina Machado no abandonaron la concentración hasta entrada le tarde.
Redacción Madrid