MADRID – Primer dolor de cabeza para la ministra del Trabajo, Yolanda Díaz. Los empresarios pican delante. Luego de que la segunda vicepresidenta anunciara su intención de convocar con urgencia a los agentes sociales, ponen las cartas sobre la mesa. Decimos, hacen su oferta.
Los empresarios, en principio, no se oponen a un incremento salarial. Sin embargo, dejan claro que no aceptarán un aumento superior al 6 por ciento en dos años. De esta manera, el Salario Mínimo Interprofesional, ahora en mil 80 euros, pasaría a mil 112, en 2024, y a mil 145 el año siguiente. Señalan que es lo que está escrito en el “V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva” que firmaron los sindicatos. La propuesta de la patronal tiene una condición “sine qua non”: “la modificación de la normativa de revisión de precios en los procesos de contratación del sector público, para repercutir el incremento del SMI en los contratos en ejecución”.
Las organizaciones sindicales discrepan. Consideran que los aumentos no pueden ser inferiores al nivel de inflación. Comisiones Obreras y UGT coinciden en que el Salario Mínimo Interprofesional no puede estar por debajo del 60 por ciento del salario medio. Es esta, además, una condición establecida en la Carta Social Europea.
Por su parte, la ministra del Trabajo ha asegurado que una de sus tareas será abordar la subida del Salario Mínimo Interprofesional el próximo año.
Los empresarios abren un debate sobre el incremento salarial mientras en la Eurocámara el debate es otro debate. Y tiene la Ley de Amnistía como protagonista. El Partido Popular y Vox han llevado a Estrasburgo la polémica que mantienen con el gobierno en Madrid. Y obligado al Comisario europeo de Justicia, Didier Reynder, a tomar posición. Este, no podía ser de otra manera, ha señalado que “el debate sobre la Ley de Amnistía ha de producirse en España”; ha precisado que “debe enmarcarse en el ámbito Constitucional”; y ha advertido que “la Comisión, como guardián de los tratados, analizará el encaje del proyecto de Ley para asegurar su compatibilidad con el derecho comunitario”.
El primer Consejo de ministros del gobierno recién estrenado, en palabras de la ministra portavoz Pilar Alegría, se ha realizado en un clima de colaboración “y con muchas ganas de trabajar”. La primera medida adoptada ha sido la aprobación de la orden ministerial para comenzar la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado 2024.
Alegría ha comentado que “la determinación es aprobarlos los antes posible y ha asegurado que el objetivo principal del Gobierno “es seguir consolidando el crecimiento económico”.
A quienes le recordaba la promesa del Partido Popular de una “oposición dura”, la portavoz ha contestado que el presupuesto es la medida estrella de cualquier gobierno puesto que “permite dar respuesta y solución a los problemas de la gente”. Ha señalado que “si el PP en la carta de presentación lo que quiere es poner palos en las ruedas para unos presupuestos que son vitales para la gente de este país, serán ellos quienes lo tengan que explicar”.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como hiciera hace cuatro años, escribió una carta a los integrantes del Ejecutivo. En ella, el jefe de Gobierno invita a sus ministros a responder a la crispación con trabajo.
A.T./Redacción Madrid
