CARACAS – La oposición venezolana rechazó la expulsión del dirigente Juan Guaidó de Colombia, quien tuvo que refugiarse en Estados Unidos, bajo la coacción de que, si se negaba, sería deportado y entregado al régimen de Nicolás Maduro.
Guaidó quien ingresó a Colombia a pesar de no estar invitado, con el propósito de reunirse con las delegaciones en el marco de la reunión convocada por el presidente Petro para buscar reactivar el diálogo político venezolano, había anunciado su candidatura hace algunos meses y en l ocasión acusado al mandatario colombiano de avalar las amenazas de la dictadura.
Sin embargo, según Voluntad Popular, tenía prevista algunas reuniones en Colombia con representantes de los países que participarían en la conferencia, así como con miembros de la oposición disidente.
Según un pronunciamiento, “con estas acciones, el presidente Petro deja claro su compromiso incondicional con el dictador Maduro y no con el respeto a los Derechos Humanos“, al tiempo que solidarizó con Guaidó y rechazó el hostigamiento a su familia por lo sucedido, al igual que lo hizo la Plataforma Democrática.
Asimismo, los miembros de la Asamblea Nacional de 2015 condenaron la situación que como a otros, ha obligado a salir del país al ser considerados criminales por el régimen de Maduro, y alzó la voz en favor del retorno a la democracia en Venezuela y exhortó a los países hermanos a tener un trato digno e institucional con el diputado Guaidó, quien merece un apoyo solidario.
Guidó no fue expulsado
Pr su parte el presidente de Colombia, Gustavo Petro aclaró que Juan Guaidó no fue expulsado de país y que si hubiera pedido asilo, se lo hubiera concedido.
“Guaidó tenía un acuerdo para viajar a EEUU. Nosotros lo permitimos por razones humanitarias a pesar de la entrada ilegal en el país”, explicó el mandatario.
Las autoridades colombianas aseguran que la salida del dirigente opositor de sueño colombiano cumplió con todas las garantías del proceso, por lo que “técnicamente no fue una expulsión”.
Redacción Caracas
