MADRID – Misión cumplida. La ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, puede considerarse satisfecha. Luego de meses de conversaciones, Bruselas dio finalmente el visto bueno. Y el Gobierno, en Consejo de Ministros, pudo aprobar la prórroga de la “Excepción Ibérica”. El mecanismo que pone límites al incremento del precio del gas tenía los días contados. De hecho, expiraba el 31 de mayo. Ya no. Seguirá vigente hasta finales del año.
– Tenemos un mecanismo, una herramienta que permite seguir protegiendo a los consumidores – afirmó la ministra Ribera.
La vicepresidenta tercera considera poco probable que el mecanismo pueda activarse nuevamente. Estima que el precio del gas se mantendrá estable y en los niveles actuales. Sin embargo, aseguró que, en el caso de un nuevo incremento del precio del gas, el costo de la electricidad se mantendrá en niveles “razonables”. La “Excepción Ibérica”, en opinión de la ministra Ribera, blinda a los consumidores españoles, y también a los portugueses, ante subidas exageradas de los precios de la electricidad este verano y comienzos del invierno.
A nadie escapa que el equilibrio en la coalición de Gobierno es cada vez más precario. Y si alguien todavía tenía dudas, la última rueda de prensa después del Consejo de Ministros sin duda alguna las habrá despejadas. En efecto, es una costumbre consolidada en el tiempo que, cuando se aprueba una nueva Ley, sea la titular del Ministerio responsable quien explique sus alcances e ilustre los detalles. Sin embargo, hasta las tradiciones más arraigadas pueden romperse. Es lo que ha ocurrido con la presentación de la Ley de Familias.
Lo lógico hubiera sido que encargada de desgranar los aspectos positivos del nuevo instrumento legal hubiese sido la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra. Y, en efecto, así lo ha hecho. Pero no en la sala de prensa de La Moncloa. Mientras la vicepresidenta primero, Nadia Calviño, y el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, explicaban la importancia de la Ley de Familias, la ministra morada hacía lo propio a través de las redes sociales.

La ausencia de la ministra de Derechos Sociales no ha pasado desapercibida a los periodistas. Aun cuando la ministra Belarra ha evitado comentar su ausencia en la rueda de prensa, en los pasillos de la sede del partido morado era evidente el malestar. Consideran patente la existencia de una estrategia para invisibilizar a Podemos y a sus representantes en el Gobierno. Las tensiones entre Psoe y Podemos crecen a medida que se acerca la fecha de las elecciones autonómicas y municipales. Aún así, todos, en la coalición de Gobierno, descartan un divorcio inminente.
El Tribunal Supremo se ha pronunciado. Y ha anulado la sentencia a través de la cual se cesaba al coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid. Como se recordará, el coronel dejó de ejercer en su cargo a raíz de un informe de la Policía Judicial. En el, se atribuían a De los Cobos presuntas responsabilidades en la expansión del Covid-19. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, había justificado la decisión de cesar De los Cobos argumentando razones de organización interna y pérdida de confianza.
La resolución del Tribunal Supremo ha reavivado la polémica y el Partido Popular, Vox y Ciudadanos han vuelto a solicitar las dimisiones del ministro del Interior. También lo han hecho asociaciones de la guardia civil.
– Después de esta sentencia – dijo la portavoz del Partido Popular, Cuca Gamarra -, tendríamos que estar hablando del exministro Marlaska. No cabe más que su cese fulminante o su dimisión si es que todavía le queda un poquito de dignidad.
No obstante, el ministro Marlaska ha descartado sus posibles dimisiones.
A.T./Redacción Madrid