Presidente Biden: “Sistema bancario es seguro”

New York – El presidente de los Estados Unidos Joe Biden pidió este lunes a los estadounidenses confianza en el sistema bancario del país que afirmó “es seguro”, tras la quiebra el viernes en California de Silicon Valley Bank y de Signature Bank el domingo en Nueva York.

“Gracias a la rápida actuación de mi Administración en los últimos días, los estadounidenses pueden confiar en que el sistema bancario es seguro”, afirmó Biden, y el dinero depositado “estará ahí cuando lo necesiten” quienes se lo confiaron a una institución financiera”, señaló antes de la apertura de los mercados financieros.

Biden explicó que dio instrucciones a su equipo para proteger a los trabajadores y a las pequeñas empresas, y detalló su plan para garantizar que los depósitos de los clientes estén a salvo y no poner en riesgo el dinero de los contribuyentes, a pesar de que no rescatará a las instituciones afectadas.

Según el mandatario, el gobierno hará lo posible para que los ahorristas recuperen su dinero y, en cualquier caso, “los contribuyentes no se harán cargo de las pérdidas”.

“El dinero procederá de las cuotas que los bancos pagan por el seguro de depósitos”, afirmó, durante una breve intervención ante los medios, un día después de que los órganos reguladores lanzaran un plan para proteger los depósitos del SVB y del Signature Bank.

Biden también anunció que “la dirección de estos bancos será despedida” y los accionistas no serán protegido.  Además dijo que pedirá “al Congreso y a los reguladores bancarios que refuercen las reglas para los bancos, de modo que sea más improbable que se repita este tipo de quiebra bancaria”.

“Si la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) se hace

cargo del banco, las personas que lo administran ya no deberían trabajar allí. Los inversionistas no estarán protegidos. Se arriesgaron a sabiendas y cuando el riesgo falla los inversores pierden su dinero. Así es como funciona el capitalismo”, añadió.

Los reguladores financieros tuvieron que cerrar el SVB el viernes por falta de liquidez, luego de una corrida de los depositantes, tras el anuncio de la entidad que estaba haciendo frente a dificultades financieras que le habían llevado a deshacerse de inversiones por valor de unos 21.000 millones de dólares, con una pérdida de unos 1.800 millones.

Posteriormente se hundió la cotización bursátil de la compañía, lo que a su vez afectó al sector bancario en Estados Unidos y otros países.

Lascia un commento