CARACAS – La comunidad italiana y literaria se une al duelo por la muerte de la escritora ítalo venezolana, Victoria de Stefano, quien falleció este 6 de enero en Caracas a la edad de 82 años, dejando un hermoso legado literario de novelas y poesías, por el cual fue reconocida, apreciada y premiada.
Nacida Rimini, Italia, llegó a Venezuela con apenas 4 años en 1946, donde se radicó con su familia, se formó y egresó como licenciada en Filosofía en la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde se además trabajó como profesora de Filosofía Contemporánea, Ética y Estética.
Casada con el filósofo Pedro Duno, y madre de dos hijos, tuvo que exilarse por temas políticos y vivir en La Habana, Argel, Zúrich, París, Barcelona y Chile, aunque luego regresó para radicarse nuevamente en el país.
Destacada por sus novelas en la literatura venezolana contemporánea, por “Historias de la marcha a pie” (1997), obtuvo el Premio Municipal de Novela y fue finalista del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos en 1998. Mientras que en 2018 fue condecorada por el Embajador Silvio Mignano en nombre del gobierno italiano, con la Orden de Cavaliere della Repubblica Italiana.
Entre sus últimas publicaciones están un relato fragmentario de episodios autobiográficos (2019) publicado por Taller Blanco, en Bogotá y además sobresalen El desolvido (1971, 2006); La noche llama a la noche (1985); El lugar del escritor (1992); Cabo de vida (1993); Lluvia (2002) y Pedir demasiado (2004).
De Stefano fue también ensayista de obra como Sartre y el marxismo (1975), Poesía y modernidad, Baudelaire (1984, Premio Municipal de Ensayo) y La refiguración del viaje (2005).
Redacción Caracas
